Toda la vida he vivido en el campo rodeada de granjas de familiares y amigos y convivido con animales, especialmente perros y caballos, ambos han sido mi pasión. Rescaté a mi primer perro cuando tenía 12 años y supe en ese momento que en mi corazón siempre estaría la convicción de ayudar a los perros.

Años más tarde preocupada por tantas opiniones negativas respecto al comportamiento de los perros que privaban en el Reino Unido. Decidí en el 2012 cursar un programa de educación con Sheila Harper, y así apoyar de manera profesional a propietarios de perros y centros de rescate con un enfoque de intervención libre de violencia para los perros.

En 2017, el cursar el programa de educación con Turid Rugaas en el Reino Unido, fue muy importante para mí y me inspiró a seguir adelante en mi formación, tratando siempre de marcar la diferencia, a favor del bienestar de los perros. Mi convicción es brindar mi preparació, conocimiento y experiencia, a las personas a las que tengo el honor de ayudar.

Como especialista en conducta canina , trabajo con todo tipo de perros y problemas. Pero me he especializado en tratar perros sordos, perros rescatados y los perros etiquetados como "difíciles" o "peligrosos". Todos ellos necesitan e nuestra comprensión y compasión y no menos. M interesa demostrar que existe un camino a seguir con todos los perros, a través de métodos éticos y libres de fuerza, brindándoles confianza, tanto a ellos y como a sus tutores. Los seres humanos nos merecemos eso a lo largo de nuestras vidas, ¿no es así? Los perros también lo merecen.

Actualmente convivo con dos perros en casa, Morris y Molly, que han sido una gran inspiración para mi trabajo. Morris es un perro rescatado, completamente sordo. Molly llegó a mi de cachorra con un inicio de vida difícil. Ellos me inspiran cotidianamente a hacer mejor mi trabajo con los perros con los que convivo